Sin luz, sin sombra.
Sin un pasado,
sin un presente.
Sólo queda el futuro,
sólo queda la muerte.
Huyendo de la nada
hacia ningún lugar.
Buscando una pasión,
buscando una razón,
buscando religión.
De la mano del olvido
voy por mundos ya perdidos
perdiendo lo que no tengo:
perdiendo el pasado,
perdiendo el presente.
Ante mí se abren todos los caminos,
ante mí se extienden, vacíos,
y tan solo yo decido
cuáles son los elegidos.
Tras mis pasos mueren, sin haber nacido,
las posibles sendas que nuca han sido,
quedarán en el olvido
las vidas que no he vivido.
Día a día creo
un futuro siempre nuevo,
eligiendo mi destino
sin saber qué vendrá luego.
Para Noa
No hay comentarios:
Publicar un comentario