Suspendido

Que nadie hable,
que no haya ruidos.
Que todo calle
y quede mudo.
De paz me envuelvo
como un escudo
y entonces cuelgo
entre lo oscuro,
donde ilumino
cuanto yo miro.
Y si no miro,
queda dormido.
Mas yo percibo
cada sonido,
cada susurro
que entra en mi oído,
mucho más leve
que un leve trino.
Afuera llueve
sobre mi cuerpo,
no estoy dormido,
pero despierto.
Traigo conmigo
cuanto he vivido
mientras volaba
en el olvido,
mientras estaba
suspendido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario