Al ser uno con el mundo

En el límite de mi piel
caben brisas y huracanes
que traspasan todo mi ser
ahora entran, ahora salen.

Hoy me expando con su vaivén,
percibiendo cada detalle,
los impulsos que no se ven
y el color que tiene el aire.

Se diluye mi identidad
en el todo yo me fundo,
se transforma la realidad
al ser uno con el mundo.



Yo creo mi mundo

Dentro y fuera cobra vida,
general y solo mía,
cuanto forma mi existencia,
tan humana en su esencia.

Pues soy Yo que me reflejo,
dentro y fuera cual espejo,
con mis piedras, mis enojos,
para verme con mis ojos.

Cuanto el mundo tiene mío,
en mi pecho lo recibo,
pues no existe en este nada
que yo misma no creara.



Así es

Firme mantengo mi ser erguido,
desde el centro observo mis remolinos,
es con ellos que mi alma construyo,
y al soltar yo me diluyo.

Llenando el espacio bajo mi piel,
fluyo y crezco, soy auriga y corcel,
percibiendo el límite de mi ser,
sin mirar, aprendiendo a ver.




Polaridad

Eterna polaridad,
entre dos bandos
vienes y vas,
tratando de hallar el centro,
equilibrando
en movimiento.
Dos opuestos enfrentados,
ambos iguales,
polos amados.
Mas por más que arrebatados
por mil mares
se han buscado,
a su espalda siempre queda
el otro lado
de la moneda.



Remolino creador

Percibir sin velo
la vida que bulle,
el rodar sincero
que apenas se  intuye.

En mi ser lo llevo,
impulso que fluye,
movimiento nuevo
que eterno construye.


Dando forma

Andando despacio,
que nada empuja,
volando bien bajo,
mi paso dibuja
la senda que he sido
y me conforma.
Es surco el camino
que no retorna.

Andando despacio,
creando norma,
tomando el espacio,
voy dando forma.

Tras el velo volitivo

Impulso volitivo
que empuja sin motivo
aquello cuanto miro.

Rodar que no descansa,
mi mente inquieta amansa
y todo tiempo alcanza.

Del fin hasta el principio
llenando los resquicios
en ímprobo ejercicio.

Hoy entro en tu cascada
portando un candil,
tu esencia iluminada,
porque hoy estoy aquí.



Sociedad libre

Fue primero el individuo
desplegando su interior,
ser que vino desde antiguo
aprendiendo a ser mejor.

Él dirige su actuar
según mejor le parece,
desarrolla su moral
que solo a él pertenece.

Y es en esta libertad,
por el bien mayor guiada,
que surge la sociedad
en amor bien conformada.


Cardando, cardando

Cardando, cardando,
que el frío aprieta,
despacio calmando
mi mente inquieta.

Sin pausa esponjando
este alma espesa,
la vamos hilando
y se despeja.




Reflotando la alegría

Paso a paso voy bregando
por los cauces de la vida,
paso a paso rastrillando
lo concreto en cada día.
Aceptando los quehaceres
que componen mi rutina,
reconozco los deberes
que hasta hoy dormían.
Paso a paso navegando,
reflotando la alegría,
en lo inerte voy entrando
y en mi acto cobra vida.